domingo, 9 de agosto de 2009

INGREDIENTES DEL TEATRO INFANTIL ORTODOXO

Vacaciones de invierno, día del niño...ni la gripe A frenó la proliferación cual virus de los espectáculos más oportunistas y menos imaginativos para niños.
He aquí lo que considero ingredientes necesarios para lograr la cara azorada de un niño:

- ser psicopedagoga, maestra jardinera o de primaria. Con eso ya se está capacitado para escribir una obra... o incluso actuar.
- canciones infantiles. Que casi siempre equivale a decir melodías chiquititas con letras pavitas. La poesía, los contenidos meditados o didácticos o la fantasía elaborada es para los adultos.
- tres cubos de diferentes colores. Que sirvan para cualquier cosa, demostrando con esto una asombrosa capacidad imaginativa y práctica.
- un muñeco humanizado y tonto. Con una persona que adentro sienta mucho calor y varios padres afuera que sientan calor ajeno.
- explicaciones verbales de lo que ocurre. Ejemplo: "¡Uy, cómo se enoja Pirulo!", mientras ocurre la acción (ocurre que Pirulo se enoja mucho).
- apelar a personajes famosos y mezclarlos sin pudor. Donald, Batman, Ben 10, Blancanieves y Maradona en la misma escena.
- imprimir a la obra un "gran ritmo físico". o sea, saltar, correr, gritar, gesticular mucho todo el tiempo.
- convencerse de que los chicos todo lo perdonan. Una escenografía berreta, una historia que no para de hace agua, unos casi actores.

No hay comentarios:

Publicar un comentario